Viveros Merimar y el pulpo espoliado del Sáhara Occidental

Nombre de la empresa

Viveros Merimar (Angulas Aguinaga)

Sector económico

Alimentació, Alimentación

Sector económico (Detalle)

Sector pesquero. Productos del mar especialmente bacalao, angulas, salmón y pulpo.

Empresas involucradas

Viveros Merimar (Angulas Aguinaga)

Empresas involucradas (Detalle)

El año 2018, la empresa guipuzcoana Angulas Aguinaga adquirió la empresa Viveros Merimar y toda su actividad. Desde entonces, la Administración y equipo ejecutivo toma las decisiones estratégicas y comerciales de la empresa palenciana incluyendo sus actividades en el Sáhara Occidental y la venta de sus productos. La empresa Angulas Aguinaga afirma que la adquisición de Viveros Merimar contribuirá a aumentar sus beneficios anuales.

Empresas involucradas (Fuente)

Descripción breve del proyecto económico

Angulas Aguinaga, fundada en 1974, es una empresa internacional con sede en Guipúzcoa especializada en el sector pesquero. La empresa ha incrementado sus cifras de facturación y ampliado su grupo empresarial desde los años 90. Entre sus principales adquisiciones destaca la empresa palenciana Viveros Merimar, especializada en comercialización de cefalópodo (pulpo) a diferentes puntos del mundo.

Viveros Merimar importa el pulpo congelado desde origen y realiza su tratamiento a las instalaciones de Polígono San Antolín de Palencia a través de procesos de recepción, tratamiento, conservación, fabricación, envasado y venta del producto a cadenas de supermercados. Así mismo, la empresa palenciana tiene plantas de tratamiento en Marruecos para asegurar las cadenas de frío de los productos que adquiere.

La empresa de distribución Viveros Merimar es una de las principales productoras y distribuidoras de pulpo cocido. La compañía exporta sus productos a países como: Italia, Grecia, Portugal, Bélgica, Alemania, Francia y República Dominicana.  Tal como apuntan en su página web “el pulpo procede de las principales lonjas de Dakhla”, indicando de forma errónea que aquella ciudad es parte del Marruecos. Dakhla es parte de los territorios saharauis ocupados por el Reino de Marruecos desde 1976. De acuerdo con el Derecho Internacional, Marruecos no tiene ninguna soberanía sobre los territorios y recursos naturales del Sáhara Occidental.

Por lo tanto, la empresa aporta información engañosa sobre la procedencia del pulpo que comercializa y, el que es peor, ofrece un producto expoliado de un territorio ocupado y pendiente de descolonización.

Descripción breve del proyecto económico (Fuente)

Ciudad/País

Sàhara Occidental,Sahara Occidental

Derechos vulnerados

Acceso al territorio, Afectación economía local, Consulta previa libre e informada, Complicidad / influencia en conflictos armados, oc...

Descripción

El gobierno del Marruecos ocupa desde 1976 gran parte del pueblo del Sáhara Occidental y sus territorios. Marruecos lleva a cabo actividades económicas, en complicidad con empresas marroquíes e internacionales, de expolio de recursos naturales vulnerando las Convenciones de Ginebra y otras disposiciones del Derecho Internacional Humanitario, que prohíben las prácticas de saqueo y obtención de beneficios de los recursos naturales del pueblo saharaui.

Las aguas del Sáhara Occidental son ricas en productos del mar como la sardina o el polpo. De hecho, según la FAO los caladeros de pulpo de Dakhla, en el sur del Sáhara Occidental, son de los más importantes del mundo (FAO 34). El pulpo es una especie sedentaria, por lo tanto, es relativamente fácil identificar la situación de los principales caladeros de pulpo y su trazabilidad.

El gobierno del Marruecos controla militarmente las aguas del Sáhara Occidental y otorga licencias de pesca del pulpo solo a empresas marroquíes. Mientras que establece cuotas de pesca de otras especies, como la sardina y pelagicos a empresas internacionales a través de acuerdos comerciales con la UE, Rusia, Estados Unidos o Japón. Paralelamente, los grandes beneficios que obtiene Marruecos del sector pesquero, han promovido la creación de una vasta industria por la captura, pero también por el tratamiento de los productos (conservas, congelación, comercialización, etc.). Esta industria conservera y de tratamiento se sitúa principalmente a los puertos principales de desembarco del producto: en el Sáhara Occidental, Dakhla, Aaiún y en menor medida, Bojador; y Marruecos, principalmente Agadir. El puerto de desembarco determina el origen del producto que tiene que quedar reflejado en la etiqueta de origen y que es importante para determinar la trazabilidad del producto por la empresa importadora y distribuidora, y sobre todo por la seguridad del consumidor final en términos de seguridad y salud.

Según el derecho internacional en general y las sentencias del TJUE de 2016-18, el gobierno del Marruecos no tiene soberanía sobre los recursos naturales del Sáhara Occidental, incluyendo el pescado, y, por lo tanto, las actividades económicas con estos recursos son ilícitas a condición de que no incluyan el consentimiento explícito y claro por parte del pueblo saharaui representado por el Frente Polisario. El Polisario y el pueblo saharaui no ha dado su consentimiento por estas y otras actividades económicas en su territorio.

Las empresas españolas como Viveros Merimar, subsidiaria de Angulas Aguinaga, que importan el pulpo y otros productos del mar, a través de empresas marroquíes o captura directa, del Sáhara Occidental están participando de forma indirecta de estas actividades ilícitas, contribuyendo al desarrollo de la ocupación y obstaculizando el proceso de paz y resolución de conflicto del Sáhara Occidental.

En este sentido, es importante destacar que la industria del sector pesquero marroquí e internacional en el Sáhara Occidental está suponiendo la construcción de infraestructuras industriales, pero también la proliferación de asentamientos de colonos en el Sáhara Occidental a través de estrategias de anexión territorial y la transferencia de población de la potencia ocupando de Marruecos (Consultar Plan Halietus). El Frente Polisario no ha participado en los Acuerdos de pesca UE-Marruecos, que han supuesto grandes tensiones en la sede de la UE, puesto que esta institución supranacional y sus instituciones no pueden contradecir el derecho internacional.

Fuente