Tres casos de impunidad corporativa en el contexto de la ocupación ilegal del Sahara Occidental por parte de Marruecos 

Desde que España abandonó el Sáhara Occidental en 1975, ha intentado sin éxito eximirse de su responsabilidad internacional como potencia ocupante, de iure, del Sáhara Occidental. Mientras que paralelamente ha contribuido a acuerdos comerciales con Marruecos, como los Acuerdos de pesca entre la UE y Marruecos, para defender los intereses de la flota pesquera española en esa región, a pesar de que esos acuerdos legitiman la explotación ilegal de los recursos naturales y han sido declarados ilegales por el TJUE. 

El Frente Polisario es el actual legítimo y único representante del Sáhara Occidental -considerado Estado no Autónomo pendiente de descolonización por Naciones Unidas-, y no ha dado  el consentimiento para la explotación de los recursos naturales en la zona ocupada: ni en el marco de los acuerdos comerciales o de asociación entre EU-Marruecos. Tampoco ha consentido otras operaciones de extracción ilegal de los recursos naturales llevadas a cabo por parte de empresas transnacionales, en complicidad Marruecos, potencia ocupante ilegal. 

El Observatorio de Derechos Humanos y Empresas en el Mediterráneo en colaboración con el portal SOS SAHARA aportamos a la base de datos AlertaDH tres nuevos casos de empresas que están operando de manera ilegal en Territorios Ocupados del Sahara Occidental.  Se trata de Viveros Merimar, Siemens Gamesa y ABB.  

Viveros Merimar 

Viveros Merimar importa pulpo congelado «procedente de las principales lonjas de Dakhla”, tal y como indican en su página web, indicando de forma errónea que aquella ciudad es parte del Marruecos. Dakhla es parte de los territorios saharauis ocupados por el Reino de Marruecos desde 1976. Por lo tanto, la empresa aporta información engañosa sobre la procedencia del pulpo que comercializa y, el que es peor, ofrece un producto expoliado de un territorio ocupado y pendiente de descolonización.

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Siemens Gamesa 

En el parque eólico de Foum el Oued, cerca de El Aaiún en el Sáhara Occidental ocupado, 22 molinos de Siemens Gamesa aportan el 95% de la energía que necesita la empresa nacional marroquí Office Chérifien des Phosphates (OCP) para la extracción del recurso no renovable de los fosfato de las minas de PhosBucraa. Según el DIH y las resoluciones de Naciones, TJUE y la Audiencia Nacional, Marruecos no tiene soberanía sobre el territorio del Sáhara Occidental y por tanto, no puede establecer acuerdos económicos y comerciales con ninguna empresa multinacional. En este sentido, las actividades económicas de Siemens Gamesa son ilícitas y suponen el saqueo de los recursos naturales renovables como el viento, pero también no renovables como el fosfato puesto que la energía del parque eólico de Foum el Oued es imprescindible para mantener la extracción de este recurso.

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ABB 

ABB ganó en 2017 un contrato de 16 millones de dólares para la construcción de una subestación híbrida para el parque eólico de Aftissat, cerca de Bojador, en los Territorios Ocupados del Sáhara Occidental. Aftissat, operativo desde finales del 2018, forma parte de la apuesta de estos últimos años por la construcción de parques eólicos en los Territorios Ocupados. Las actividades de ABB vulneran el derecho de los pueblos a administrar sus propios recursos naturales y, por ende, el respeto al consentimiento previo, libre e informado en cuanto a la explotación de sus materias primeras se ha visto comprometido por la falta sistemática de consulta sobre las operaciones extractivas a la población saharaui y a sus legítimos representantes.

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Aprovechamos para alertar a las empresas catalanas y españolas que operan en la zona que, a pesar de que su actividad se encuentre bajo acuerdos bilaterales entre la UE y Marruecos, éstos son inconsistentes con la legalidad internacional, tal como lo explicamos en la guía “La dimensión legal de la ocupación del Sahara Occidental y sus recursos naturales” . Por tanto, esta situación no exime a estas empresas de su responsabilidad legal. Las empresas transnacionales deben aplicar los principios de debida diligencia para evitar que sus operaciones vulneren, de forma directa o indirecta, los derechos humanos de las poblaciones donde operan. Por otra parte, y en contradicción con los principios europeos y de regulación del Estado español en materia de derechos del consumidor, la acción empresarial de extracción ilegítima de recursos que se vale de los acuerdos comerciales como excusa, deja en una situación de inseguridad a los consumidores finales quienes, sin saberlo, podrían estar consumiendo productos expoliados del Sáhara Occidental contra su voluntad. Finalmente, las empresas tienen que tener en cuenta que estas operaciones están suponiendo un obstáculo para la solución política del conflicto y perpetúan la situación de ocupación del territorio y población saharaui. 

El Observatorio de Derechos Humanos y Empresas en el Mediterráneo (ODHE) es una iniciativa de SUDS y NOVACT que identifica, sistematiza y genera propuestas para abordar las vulneraciones de derechos humanos de poblaciones bajo ocupación y/o conflicto armado en la región Mediterráneo, a través de la investigación, la sensibilización y acciones de incidencia social e institucional. 

SOS Sáhara es una herramienta impulsada por ACAPS y NOVACT para monitorizar los abusos constantes y la sistemática vulneración de derechos humanos, individuales y colectivos que se dan en el Sáhara Occidental ocupado por parte de Marruecos, así como los casos de empresas implicadas en el expolio de recursos naturales que contribuyen a perpetuar la vulneración de derechos del pueblo saharaui y la ocupación del Sáhara Occidental. 

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